Y YA VAN DOS AÑOS

María me envió esta foto, y me preguntó si le podía hacer el conjunto de gargantilla y pulsera, y como siempre, pues dije que si, que ningún problema, que a mi también me afecta la crisis y no están las cosas para ir diciendo que no, pero cuando vi el color de la tela pensé -"en menudo embolao me he metido" para conseguir el tono exacto tendré que dar más vueltas que la noria del Tibidabo, pero mira tú, que a veces los astros se ponen de tú lado y toma castaña, a la primera encontré las telas. Así que este fin de semana lo he cosido y hoy lo envío...arrivederchiiiiiii. Podéis apreciar que ya me estoy formalizando y me he dignado a entregar las cosas con un poco más de decencia, ya tengo mis etiquetitas bolsiles. En casa de herrero cuchillo de palo.

Y cambiando de tercio, creo que la mala pata de mi marido ha desaparecido, y creo que es así porqué ahora la tengo yo. Ayer se me ocurrió pasear por el bosque para ver si ya habían salido setas y me pegué un batacazo del que aún me duelen las cejas, joderes que caída más bruta, de culo total y patas pa'rriba, de esas que te tocas el espinazo y ves que aún sigue allí de milagro, y lo que me sorprende, es que yo he sido una de esas personas que han estado más en el suelo, que de pié, es decir de estabilidad nula, pero nunca me hacía daño, será cosa de las mollas, digo yo. Pero las cosas van cambiando y pronto ya me veo con el fémur o la cadera rota igualita que las yayas. A ver si con tanto amirigumi, alguien han hecho uno con mi cara y le está clavando alfileres, que hay mucha mala leche suelta por el mundo. 

Bueno, menos mal que para alegrar el día puedo decir que hoy hace dos años que me casé, y lo volvería a repetir con los ojos cerrados, bueno, abiertos, porqué me enteré bien poco. Así que nos vemos por aquí el lunes, que aquí los catalanes tenemos un puente de cuatro días gracias a la Diada del 11 de septiembre.

T'estimo molt Cèsar.